La Generalitat aplaza el pago del impuesto de bebidas y el de sucesiones

El Govern aplazará hoy el pago del impuestos de sucesiones y de bebidas azucaradas para ayudar a superar los efectos económicos negativos del coronavirus. La medida forma parte de un plan económico que el Consell Executiu del Govern prevé aprobar hoy.

Fue anunciada este lunes por el vicepresident del Govern, Pere Aragonès, durante una comisión parlamentaria telemática. El aplazamiento de sucesiones será por un periodo de dos meses una vez finalice el estado de alarma.

En cuanto al impuesto de bebidas azucaradas que abonan las empresas productoras, la decisión que se ha tomado es posponer el pago de la cuota de abril al siguiente trimestre. Asimismo, el Govern tendrá hoy encima de la mesa el aplazamiento del canon de residuos y agua en el ámbito industrial.

“Hablamos siempre de aplazamientos y medidas temporales de liquidez”, dijo Aragonès. Por ahora se ha mantenido inalterable la política tributaria si bien se han tomado varias medidas para aplazar los citados pagos. Nunca eliminarlos ni condonarlos.

Aragonès aprovechó su comparecencia para pedir al Estado el mismo esfuerzo en las cuotas de autónomos y Seguridad Social y sin aplicar intereses de demora.

Durante su comparecencia, Aragonès destacó que el Govern ha impulsado diversos decretos con el objetivo de mantener la cadena de pagos y la liquidez en el tejido productivo con medidas como créditos del ICF (Institut Català de Finances), avales y el mantenimiento del pago a sus proveedores pese a que los contratos estén suspendidos. El objetivo es garantizar los sueldos de los trabajadores afectados que tienen relaciones con la administración catalana.

El vicepresident también se refirió a la ayuda de hasta 2.000 euros que pueden solicitar desde este lunes los autónomos que hayan visto recortados sus ingresos. Ese programa cuenta con un presupuesto de 7,5 millones de euros, por lo que se podrán beneficiar del mismo alrededor de 4.500 personas. Teniendo en cuenta que en Catalunya hay alrededor de medio millón de autónomos, la ayuda sólo sería accesible para menos del 1% del colectivo. Sindicatos como CC.OO. avisaron la semana pasada de que la partida era insuficiente.

Aragonès aprovechó también su comparencia para pedir al Gobierno la suspensión “formal” de los objetivos de déficit, de deuda y la regla de gasto para este año para poder hacer frente a la crisis del coronavirus.

Aunque el vicepresident no ofreció estimaciones acerca de qué nivel de déficit podría llegar a acumular Catalunya en el 2020 como consecuencia de esta crisis, sí que señaló que el crecimiento será sustancial. El año pasado, la Generalitat cerró con un déficit del 0,56%, casi seis veces más que el objetivo previsto.